¿Piensa que el aprendizaje social no tiene cavidad en su industria? Piense de nuevo
Hay muchos mitos acerca del aprendizaje social que han salido a la luz últimamente, que menos mal han sido desmentidos. Por ejemplo, a pesar de las minúsculas similaridades, el aprendizaje social no tiene que ser facilitado por medio de plataformas de redes sociales como Facebook, twitter e Instagram.
Uno de los conceptos erróneos más frecuentes es que el aprendizaje social solo puede ser aplicado exitosamente a ciertas industrias. La naturaleza del aprendizaje es una práctica que significa que esto simplemente no es verdad – todos pueden partici^ar en el aprendizaje social, y de hecho, probablemente ya está siendo beneficiado por las actividades del aprendizaje social.
Aprendizaje Social: ¿Construcción corporativa?
Quizás la raíz de estas preocupaciones es que el aprendizaje social es un concepto que se deriva de el espacio del aprendizaje corporativo, quizás para «interrumpir» los modelos tradicionales de aprendizaje o para atraer a la afluencia de millennials en la fuerza laboral. De manera contraria con lo que las personas piensan, el aprendizaje social no es nada nuevo. Este ha sido usado por muchos años, muchos más antes que las personas empezaran a aprender. De hecho, el comportamiento aprendido es una parte importante de la evolución.
La raíz del término «aprendizaje social» como lo conocemos en los negocios hoy en día se deriva de la teoría del aprendizaje social, una teoría de comportamiento que tiene sus orígenes a mediados del siglo veinte. Albert Bandura, un psicólogo que ha contribuido de gran manera a la teoría cognitiva social, discutió que «el aprendizaje no es puramente conductual; en vez, es un proceso cognitivo que se lleva a cabo en un contexto social»
Aunque el aprendizaje social siempre haya estado presente en el lugar de trabajo, ha crecido y se ha vuelto una forma inmensamente importante del aprendizaje corporativo en las últimas décadas. Las metodologías como la teoría 70:20:10 han permitido que las empresas empiecen a reconocer su papel en el proceso del aprendizaje, y nuevos desarrollos en las tecnologías para el aprendizaje le permiten a las empresas a implementar, gestionar y medir fácilmente las actividades de aprendizaje social.
El éxito universal del aprendizaje social
El aprendizaje social ha brindado varias ventajas a los empleados y a las empresas en una variedad de industrias. Por ejemplo, se reportó que el 45% de doctores en Stanford se beneficiaron del uso de Figure 1, una aplicación para compartir fotos dedicada para el uso de los profesional de la atención médica
De igual manera, el grupo Vision Hospitality, una firma de gestión y desarrollo hotelera, experimentó el éxito con la introducción de un programa de aprendizaje social. Megan Brown, la directora de cultura y talento del grupo Vision Hospitality, observó «que hay una gran correlación entre los hoteles que están motivados con las capacitaciones brindadas por medio de Docebo con altas puntuaciones en satisfacción de huéspedes, a comparación de los hoteles que todavía no hacen uso de Docebo para llevar a cabo sus capacitaciones empresariales. «
En Docebo, nosotros también hemos experimentado el éxito con el aprendizaje social con un caso de uso completamente diferente. Docebo ha crecido por 433% desde el 2013. El alto crecimiento nos ha demandado que encontremos una mejor manera de llevar a cabo la inducción de nuestro equipo de ventas. A partir de la implementación del aprendizaje social, el tiempo que nos lleva la inducción de nuestros nuevos representantes de ventas se ha reducido por un 50%, y el tiempo de inducción de nuestros Ejecutivos de ventas por un 25%.
El papel de la tecnología para el aprendizaje en el aprendizaje social
Las industrias altamente reguladas pueden ser precavidos a la hora de implementar el aprendizaje social. Sin embargo, la tecnología para el aprendizaje correcta puede asegurar que el aprendizaje social sea dirigido a las audiencias correctas y ayudarle a mantenerse en cumplimiento. Similarmente, la tecnología para el aprendizaje puede ayudar a medir y excavar datos importantes del aprendizaje social, permitiéndole a las empresas a reusar el capital de conocimiento, llenando las brechas del conocimiento, y cultivando una cultura de aprendizaje.
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